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Puede sentir como si alguien estuviera sentado en su pecho o como si hubiera una nube en sus pulmones. Luchas por tomar una respiración completa. Tu pecho se aprieta. Tu respiración se acelera.
Se siente, como dijo una persona que sufre de asma, "como si estuvieras ahogándote en el aire".
El asma es una inflamación y obstrucción de los bronquios, los conductos que permiten que el aire entre y salga de los pulmones. Durante un ataque de asma, los músculos que rodean los bronquios se contraen, estrechando las vías respiratorias y dificultando enormemente la respiración. Otros síntomas comunes son sibilancias y un sonido de traqueteo en el pecho.
La duración de un ataque puede variar, según la causa y el tiempo que hayan estado inflamadas las vías respiratorias. Los episodios leves pueden durar solo unos minutos; los más severos pueden durar de horas a días. Los ataques leves pueden resolverse espontáneamente o pueden requerir medicación, budesonide comprar generalmente un inhalador de acción rápida. Los ataques de asma más graves se pueden acortar con el tratamiento adecuado.
Encuentre un alergólogo
Causas
Un ataque de asma puede desencadenarse por la exposición a un alérgeno, como el polen de árboles, pasto o malezas, ácaros del polvo, cucarachas o caspa de animales. Otros desencadenantes comunes son los irritantes en el aire, como el humo o los vapores químicos, y los olores fuertes, como los perfumes.
Ciertas enfermedades, en particular la gripe, la sinusitis o incluso una infección leve de las vías respiratorias superiores, también pueden desencadenar un ataque de asma, al igual que el ejercicio extenuante, las condiciones climáticas extremas y las emociones fuertes que cambian los patrones normales de respiración.
Las señales de advertencia de un posible ataque de asma pueden incluir un aumento en la necesidad de medicamentos de rescate (especialmente albuterol), proair inhaler dosis empeoramiento de la tos, dificultad para respirar (especialmente si lo despierta por la noche) y disminución de la tolerancia al ejercicio.
Tratamiento
En general, es importante mantener la calma y usar los medicamentos que le haya recetado su alergólogo. Siempre debe estar disponible un plan de acción actualizado para el asma completado por su médico para ayudar a guiar el tratamiento cuando se presenten los síntomas.
Los medicamentos de alivio rápido, a menudo administrados a través de un inhalador, se usan para tratar los ataques de asma según sea necesario. Incluyen agonistas beta2 de acción corta y rápido y/o broncodilatadores anticolinérgicos (que relajan los músculos de las vías respiratorias). Si los síntomas persisten o progresan, entonces pueden ser necesarios los corticosteroides sistémicos (que reducen la inflamación de las vías respiratorias). Si los síntomas persisten, consulte a su alergólogo.
Busque tratamiento médico inmediato si la tos o la dificultad para respirar persisten o parecen empeorar.
Desencadenantes en niños
Algunos desencadenantes afectan particularmente a los niños con asma y pueden empeorar aún más la inflamación de sus pulmones. El resfriado común es uno de los desencadenantes más frecuentes de ataques de asma en niños muy pequeños. Otros incluyen:
Fumar
Exposición a alérgenos (como caspa de animales, ácaros del polvo o polen)
Olores fuertes (perfumes u otros olores)
Cambios en el clima; aire frio
Correr o jugar duro
Llorando o riendo
Si su hijo tiene asma, su alergólogo lo ayudará a descubrir los desencadenantes que provocan o empeoran los síntomas. El primer paso para controlar los síntomas es mantenerse alejado de cualquier cosa que haga toser o jadear a su hijo.
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